NO ME CASO POR LA IGLESIA
Yo le agradezco su sinceridad y le pido que reflexione sobre por qué no tiene fe y que
yo no la casaría por la Iglesia pues exige, al menos, un mínimo de fe en
Jesucristo.
Le recuerdo que ella está bautizada, la educación que ha recibido es cristiana,
fue a un colegio religioso y que sus raíces son cristianas.
Que mire a la gran persona de Jesucristo, el Hijo de Dios y su mensaje
admirable que es un mensaje de amor y de entrega. Un nuevo mandamiento os
doy que os améis los unos a los otros,
como yo os he amado (Jn 12,34).
Si la Iglesia
pide a los novios un compromiso de vivir juntos y amarse de verdad es porque
Jesús recuerda la indisolubilidad del matrimonio con estas palabras: Lo que
Dios unió que el hombre no lo separe (Mt 16,6) y que el sacramento del
matrimonio da la gracia sacramental para ayudar a vivir juntos.
Como discípulo de Jesús yo siempre respetaré tu persona y la libertad que Dios nos ha dado.